
Qué clase de alianzas son estas que, mientras el Papa al otro lado del mundo, se reúne con los luteranos en procura de la unidad, nuestros compatriotas luteranos, además de evangélicos y ¿católicos? de la UNA, se alían con homosexuales, lesbianas y abortistas para pedir la modificación de la Constitución de la República en procura de un Estado Laico cuya justificación deja mucho qué desear y que más parece un "desquite" con la Iglesia católica antes que cualquier otra cosa?
Por mi santa madre, ticos, qué nos está pasando? Acaso ahora, además de los errores gringos vamos también por los europeos? Ustedes, los “avanzados” que tanto han defendido siempre nuestra “idiosincracia” y lo de un país "libre, independiente y soberano”, están seguros que todavía saben de qué se trata?
No vamos a decir que el Estado Laico es el demonio, porque no lo es, es más, el Papa ha hablado en varias ocasiones de que es oportuna la separación entre la Iglesia y el Estado, pero, ¡vaya! que si vamos por ello, vayamos con la cabeza clara y bien, muy bien informados, formados y fundamentados, porque no es confeti lo que está en juego aquí: es la libertad de culto para todos los cultos sin excepción y con ello también la dignidad de la persona humana tal y como la concebimos los cristianos, concepción del ser humano que nos permite conducir nuestra vida de fe tal y como hemos tenido la libertad de hacerlo hasta el día de hoy.