“Mientras los hombres estaban trabajando juntos para construir la torre, de repente se dieron cuenta que estaban construyendo el uno contra el otro. Mientras trataban de ser como Dios, corrían el peligro de no ser ni tan siquiera hombres, porque habían perdido un elemento fundamental del ser personas humanas: la capacidad de ponerse de acuerdo, de entenderse y de actuar juntos”
Benedicto XVI, Homilia Pentecostés, 2012
Todos hemos tenido la experiencia de Babel ya sea en situaciones
concretas en nuestras familias, grupos o asociaciones y si no, pues que
siempre están a la orden del día noticias sobre la incapacidad del ser
humano para “ponerse de acuerdo, de entenderse y actuar juntos”
Mi Babel particular la tuve en nuestro grupo en Costa Rica que
promueve la misa tradicional pero como eso es parte de la historia y me
parece que unos y otros hemos aprendido la dura lección, no profundizaré
en ello aquí y creo que no lo haré nunca más.
Familia Bañales Becerra |
Tengo varios ejemplos de ello, uno es el más cercano círculo de
amigos nacionales y extranjeros que tengo en facebook, otro es el cuerpo
editorial de InfoCatólica, otro mi familia y, además, un círculo -de
cuyas dimensiones no estoy muy segura- constituido por mis vecinos. Ah,
también el partido PASE que preside actualmente la Asamblea Legislativa
en mi país.
Como ven, gracias a Dios, no todo son babeles y eso, no solo es necesario destacarlo sino agradecérselo al Señor.
Valeria, Alina, Leo y Susana |
Ismael, Salvador, Roberto e Ismael |
Con varios me mantengo en contacto y de otros estoy
esperando que tengan un momentito para revisar su correo, pero de todos,
absolutamente todos pero -sobre todo- viendo que no han perdido su
capacidad para de ponerse de acuerdo, de entenderse y de actuar juntos
es que he regresado de México con el corazón henchido y más fuerte.
Familia Loreto-Castañeda |
Faltó de fotografiar ese día a Issac, al Dr. Francisco, a Javier y Fabiola, a Rossina así como Ailen, el seminarista, a los tres sacerdotes, pero también faltó la encantadora familia de la señora Mariana quien tan gentilmente nos invitó a su casa a comer para probar el famoso mole poblano del que todavía conservo su sabrocito gusto a chocolate; la familia de Edgar Fernández así como la de los Fenke, pero bien, otra vez será.
El caso es que fue para mi una gran alegría poder agradecer a Dios por su existencia.
Los miembros de la familia Bañales Becerra: Vicente, Carmen, María de Jesús y Àngel
Los miembros de la familia Loreto-Castañeda: Pedro, Arantza, Deah madre y Deah hija, María y Pedro chico.
Los miembros de la familia Bañales Becerra: Vicente, Carmen, María de Jesús y Àngel
Los miembros de la familia Loreto-Castañeda: Pedro, Arantza, Deah madre y Deah hija, María y Pedro chico.