La historia de Ethel Kennedy narrada por ella misma a través de las
preguntas de su hija menor, Rory Kennedy, y transmitida por HBO ha
puesto al descubierto desde la intimidad de la vida de esta esposa y
madre de once hijos no solo la capacidad del ser humano para aferrarse
con pasión a la realidad sino aquello que profundas convicciones
cristianas promueven en la propia vida, en la familia y en la sociedad.
Una vez asesinado su esposo Robert, debió hacerse cargo de sus hijos.
Algunos de ellos, ya entrados en años quienes –además- intervienen
en el documental, hacen al espectador sentir como en casa, un miembro
más de su familia.
El amplio archivo gráfico conservado a lo largo de los años nos
acerca a su vida diaria: gozando y riendo con los niños, rezando con
ellos antes de comer, jugando al futból o esquiando, visitando a los
pobres.
Educándoles pero también instruyéndoles cuidadosa y eficientemente en
todo tipo de valores cristianos así como poniendo el ejemplo acerca de
cómo desenvolverse ante los afanes de la vida cotidiana pero también
ante todo tipo de desafíos.
Ethel Kennedy, católica de origen irlandés, mujer de firmes
convicciones -a través de la mirada de sus hijos- nos devuelve la
esperanza en la mujer y en la familia.
No pierdan oportunidad de mirar el documental.
Les dejará un dulce regocijo por el mero hecho de ser católicos.