21 de septiembre de 2013

¿Quién es Cristo, el Papa y la Iglesia para ti?

Cuál de nosotros no tiene un pariente, amigo o conocido de esos que no importa con cuánto cariño y generosidad hagas las cosas nunca quedas bien con ellos y que, si tienen oportunidad, además, buscan la manera de mortificarte?
Pues bien, así es como me parece que es el mundo de hoy.
Con “mundo” me refiero a todos aquellos que, sumergidos en su egoísmo, no comprenden el lenguaje del amor y que -si tocan el tema- te enteras de que el amor para ellos existe en tanto sea para recibir ya que rara vez consideran que el amor sea de doble vía. Narcisismo, creo que lo llaman.
En fin, uno quisiera vivir rodeado de personas generosas, equilibradas, bondadosas, cariñosas, asertivas, etc. pero no es así sino muy al contrario.
Yo, sinceramente, no creo que nuestro mundo sea más egoísta y hostil hacia los cristianos de lo que fue, por ejemplo, en tiempos de Jesús.
La cuestión es que no hemos cambiado mucho y, por lo que seguimos siendo cristianos inmersos en un mundo egoísta, es que llega tan oportuno este querido Papa que nos deja a todos como pudo haber dejado Jesús tanto a romanos como a escribas y fariseos.
Todo lo anterior únicamente para contextualizar y poder compartir con ustedes mis reflexiones acerca de las diversas reacciones de cristianos a la entrevista del padre Spadaro al Papa Francisco de esta semana.
El Papa, ha quedado claro, conoce bien el mundo egoísta en el que vive pero también las fortalezas y debilidades de los cristianos por lo que asumo cuenta con nuestras reacciones.
Unos, reaccionamos ilusionadísimos de solo pensar que la Iglesia cambie en su fundamento y otros, aterrorizados, por lo que ya no sabemos -después de haber llamado masón al Papa- qué más llamarle después de la entrevista.
Unos más, desconcertados sin saber qué decir, otros, atacando para defenderlo y los demás, enmendándole la plana. Unos cuantos, muy pocos, se la tomaron como debía.
El caso es que, se su-po-ne, que «En el modo que tenemos de vivir las circunstancias, decimos ante todos, quién es Cristo para nosotros»[1], por lo que pregunto, amable lector: quién es Cristo, el Papa y la Iglesia para ti?
Alguien de quién esperas escuchar lo que te complazca en tu particular forma de comprender y vivir la fe o alguien a quien temes escuchar por lo que pueda sacarte de la seguridad que has hallado entre batas, humos y candelas?
Alguien cuyas acciones te desconciertan al punto que no sabes qué decir?
O alguien a quien se defiende mediante el ataque o, sencillamente, alguien a quien hay que enmendarle la plana ya que, debido a su candidez, no sabe explicarse?
Quién es?
Yo misma, deberé preguntármelo dentro de un ratito.

Solo espero escuchar: - “Oye, tranquila! Solo sumérgete en mi corazón misericordioso. Ya te enterarás Quién soy si estás ahí”.


LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...