1 de agosto de 2011

¿Qué es lo que hace que suceda esto?

Explíquenmelo por favor, porque a pesar de intuir la respuesta todavía no me lo creo, que no, y que no, que no me lo creo.

Qué es lo que hace que nuestro grupo que promueve la misa según la forma extraordinaria del rito latino -luego de cada reunión- motive en los miembros expresiones como “…la verdad estoy muy agradecida con Dios por la oportunidad que me da de compartir con ustedes, refresca el alma una reunión como la de ayer. Dios les Bendiga” u otras del tipo “¡qué gratificante ver que todavía hay gente comprometida con la Iglesia Católica y con la Eucaristía! Me siento muy feliz con ustedes, y cada vez que nos reunimos siento una alegría infinita, esa alegría viene de Dios que está con nosotros. Ojalá que sigamos así por mucho tiempo”

Qué hace que los jóvenes del grupo, y cuando digo jóvenes me refiero a muchachos entre los 23 y 30 años estudiantes o profesionales se traten como amigos de toda la vida?

Qué es lo que hace que se los encuentre uno hablando en la esquina del salón sobre música sacra, oraciones en latín, sobre aquél rito o el otro, en lugar de escucharlos hablando de lo que por lo regular hablan jóvenes de esa edad?

Qué hace que iniciemos la reunión a las 5pm y la terminemos a las 10:30pm sin sentir que el tiempo ha pasado y que tan solo al día siguiente convengamos en que será necesario reunirnos pronto de nuevo?
Todo esto que estamos viviendo en torno a la promoción de un rito que ni siquiera todos hemos experimentado, las preguntas, la incertidumbre, la voluntad para ponerse de acuerdo fácilmente, sin censura para este o aquél, para tal o cual cosa, digo, es esto normal?

Es normal que uno de los miembros done gran parte de sus ahorros a la causa, que otro desembolse buena parte de su salario, que otro done su tiempo, otro sus destrezas, otro sus virtudes, etc., digo, es esto normal?

En fin, no me extiendo, el caso es que los ticos y particularmente los miembros del grupo coordinador estamos viviendo una serie de experiencias maravillosas.

No se qué hace que esta experiencia al servicio de la Iglesia sea diferente de la que tuvimos o tenemos como miembros de los grupos de liturgia en nuestras parroquias, pero –efectivamente- la experiencia es diferente; y es que –por ejemplo- yo no recuerdo haber salido de ninguna reunión parroquial de lectores sabiéndome de esta forma amada, querida, útil y necesaria. No tengo el más mínimo recuerdo de haberme reconocido así.

Por eso pregunto: ¿Qué es lo que hace que suceda esto –particularmente- en torno a la promoción de la misa según la forma extraordinaria? 

Como les digo, sospecho que tengo la respuesta pero si alguno quiere ofrecernos la suya, pues adelante, será bienvenida.

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...