Esas cosas raras que se le ocurren a uno, pero me he llegado a preguntar: - Qué habría sido de los mineros, del cuerpo de rescate, médicos, enfermeras, familiares y de todo Chile si no fueran personas creyentes?
Uno se pregunta si -caso contrario- el resultado hubiera sido el mismo, ojalá que hubiese llegado a ser igual de inspirador y satisfactorio, pero nunca se sabe… Ya saben? Es que el valor de la vida últimamente parece no ser el mismo para todos.
Estén o no de acuerdo conmigo, es innegable que los chilenos -como cristianos- han sido un ejemplo de amor, fe y esperanza, así como de alegría ante la adversidad para el mundo.
Ya ven ustedes? El Señor se ha servido de lo débil y lo sencillo para callar la boca de los necios.
El Señor, definitivamente, se está sirviendo de los chilenos para mostrar al mundo de qué se trata tener convicciones firmes.
¡Deo omnis gloria!
Permita el Señor que concluya la operación de rescate sin contrariedades.
Que María Santísima los cubra con su manto.
Les concedan también fortaleza para lo que sigue.
Amén
